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| Alumnos en X Concierto CCVO |
El día de hoy quisiera platicarles sobre un tema muy recurrente que se vive en nuestra recepción, o bien en nuestros muchos medios de contacto con padres de familia de posibles alumnos: la decisión sobre qué instrumento deben de estudiar primero los hijos. Para ello, lo haré valiéndome de preguntas típicas sobre el tema. Empecemos.
"Hola...quiero meter a mi hijo a clases, y creo que debe de ser a ______________. ¿Qué opinas?"
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| Alumna CCVO en XI Concierto CCVO |
"Pero...mi hijo tiene apenas _____ años. Él no puede decidir esas cosas"
Este tipo de comentarios no toman el contexto, más siendo padres, de lo que ha sido la vida de su hij@. ¿Acaso el niño o la niña no decidieron desde bebés si les gustaba la leche materna o no? ¿Si les gustaba el chupón? ¿Tal o cuál comida? Los seres humanos somos seres más inteligentes de lo que en veces creemos, y la capacidad de elegir viene, incluso, desde el seno materno. Sí, vamos a decir inconscientemente, pero al fin y al cabo son elecciones que de alguna manera se hicieron. No se preocupen...con la ayuda de algunos instrumentos pequeños, diseñados para niños, se puede facilitar la búsqueda de lo que a ELLOS les gusta en ese momento.
"Bueno pero...el hecho que él decida qué instrumento quiere no significa que sea el que más le convenga"
Resulta que sí es el que más le conviene. Los adultos ya pasamos por un proceso de solidificación de ideas sobre la mayoría de los temas que existen en el mundo. En algún punto ya razonamos sobre temas tan amplios y/o controversiales como la política, la religión, la vida en general. De igual forma ya tenemos nuestras opiniones sobre temas más triviales, tal como si comer verduras orgánicas o no, si es mejor un carro o una camioneta en nuestra vida diaria, y, sí, cuál instrumento musical creemos que es el mejor. Un niño aún no ha tomado esas decisiones. En su mente, de acuerdo a la forma en la que sus neuronas están conectadas en ese momento, quizá es mejor un instrumento que hace sonidos rítmicos (batería), a uno que genera notas (piano). En ese momento, eso es lo ÚNICO que importa. Que el se sienta motivado...y esa es la palabra mágica que nosotros buscamos para los niños en una clase de música: MOTIVACIÓN.
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| Alumna CCVO en XI Concierto CCVO |
"Pero...si él solamente se queda con la batería, nunca va a poder componer, o tocar alguna canción sin acompañarse de más instrumentos"
Siguiendo con la batería como ejemplo: lo importante para un niño, antes que él mismo decida ese tipo de cuestiones, es que logre salir de su etapa actual de vida (niñez) con un amor por la música. Una vez que entre a la pubertad y/o adolescencia, se dará cuenta, en su caso, que quizá la batería no es lo mejor para él. Pero como su amor por la música para ese momento será grande, no le costará mucho hacer el cambio a otro instrumento que en ese momento le llene más. Las habilidades básicas que haya aprendido con el instrumento que hasta el momento haya estado practicando, le servirán, sin duda alguna, para el siguiente.
"Pues aquí tenemos un problema...yo no quiero en mi casa una batería / un piano / una guitarra eléctrica / un violín."
Este tipo de temas se pueden resolver utilizando la tecnología en combinación con una plática familiar. En el caso de la tecnología, hay muchas formas de tener instrumentos "silenciosos". Para las baterías, se puede comenzar con una eléctrica, las cuales hay de todos tamaños y precios, y en donde se pueden utilizar audífonos. Las guitarras eléctricas y cualquier otro instrumento que involucre un amplificador también cuentan con la ventaja de los audífonos. Y con respecto a las pláticas familiares, todo es cuestión de poner horarios de práctica. Así como se les ponen a los hijos horarios para la tarea, también se les pueden poner horarios para la práctica de su instrumento, en donde, de ser el caso, no "molesten" a otros integrantes de la casa o incluso a vecinos.
Conclusión
Si un hijo o una hija demuestran interés por la música, definitivamente se les debe de encaminar a que la exploren, disfruten y desarrollen. Los beneficios de ella son bastantes, y mucho se ha hablado de ello ya en otros lugares. Pero, es de suma importancia dejar que el niño tome su propio camino, y uno como papá o mamá solamente cuidar que no se caigan en el camino. De la misma forma en que un niño aprendiendo a andar en bicicleta debe de hacerlo por su propia cuenta (o de otra forma no aprende como se debe), en la música se debe de dejar que anden solos, cuidando solamente no se caigan. Y si lo hacen, los ayudamos a levantarse y a seguir adelante. Una vez que se interiorice la forma para seguir adelante solo, no será necesario volver a voltear atrás, y será una bendición que les acompañará por el resto de su vida.
¡Gracias por leernos! ¡Nos vemos a la siguiente!
Carlos Oliveros
Centro Cultural Valle Oriente
http://www.ccvo.com.mx
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| Alumnos y maestros CCVO despidiendo el X Concierto CCVO |
